Honesta y conscientemente, me rehuso a dejarme llevar por los sentimientos, deliberadamente; y es justo en este preciso instante cuando comprendo las palabras de alguien que me decía casi lo mismo. Y empiezo, así, a sospechar que se interesó por mí, así como yo me interesé en él...entonces me pregunto: ¿Qué pasó?
Cada instante deseo renovarme a mí mismo, colorear en cada minuto un matiz singular, cuésteme lo que me cueste debo ser consecuente con mi deseo, puesto que nadie me asegura su presencia a mi lado, ni el más leal de los amigos.
Es un camino que he decidido por mí mismo, por mi propia voluntad y convicción, pero que impacta en todos los que me rodean, de forma positiva o negativa, pero nos impacta.
Mi constante pensamiento está centrado en tu imagen, en tu mirada, en tus labios, en tus manos, en tu piel. Me aferro a un recuerdo almacenado en mi cerebro pero condimentado con la dulzura de tus palabras, con la sencillez de tus letras, con la sinceridad de tu intención.
Quisiera dejar de funcionar por un momento, que pase el tiempo, inclemente como siempre lo ha sido con todos. Quisiera poder compartir contigo más tiempo, hablar más, conocernos mejor, pero un temor me acecha, y creo que tú sabes cuál es. Es un riesgo escondido en el “quisiera” de la vida, y temo convertir ese quisiera en una perenne profecía, en una interminable lucha, en un incesante deseo.
Quisiera poder expresar muchas cosas, y entender tantas otras, vivir en la claridad de mis pensamientos y de los hechos reales de mi existencia. Pues, para mí, está muy claro que ni sé lo que escribo, pero es lo que siento. y ¿quién ha dicho que todo lo que se siente se entiende?
Quisiera encumbrar una cometa y dejarla surcar entre las nubes del cielo, deleitarme en su paseo juguetón entre las aves. Quisiera construir barquitos de papel y dejarlos navegar por los riachuelos formados con la lluvia que arrecia. Quisiera tejer unos suaves guantes de lana para dar calor a tus hermosas manos. Quisiera reposar mis oídos sobre tu pecho y escuchar el latido de tu corazón y así componer música inspirada en ti, al ritmo de tu sangre. Quisiera amanecer entre tus brazos y despertarte con un besito en la frente.
Y qué más se podría decir. Tú ¿Qué opinas?
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